sábado, 29 de agosto de 2009

DEC ( Dejo Este Comentario)


Creo que mi pequeño Mando se está haciendo mayor, culturalmente hablando, y se interesa por el estado del mundo actual. Prueba de ello es que anoche me programó todo un clásico de la televisión en la idem: DEC. Siglas que dan nombre al programa "Dónde Estás Corazón" pero que ahora es reducido a tres letras para que cada uno haga una libre traducción y translación de esas siglas dependiendo del contenido del programa a emitir. Lo de anoche fue "Descalificaciones En Cadena" . Descalificaciones éstas, vertidas tanto en la cadena emisora como una cadena de insultos vertidos por los "cobraboradores" del tipo "y tú más" en respuesta a un "y más tú" previo a un "mentirosa" precedido de un "no eres nada ética"...etc etc etc. También pudo haberse llamado "Dinio En Comisaría" pues el confundido cubano tuvo su tiempo de protagonismo también esa misma noche. Pero el tema principal giró en torno a la supuesta in-out fidelidad del torero Capullín de jame que te la lubrique hacia su esposa María Nosé de qué campanario se ha caído.
Una vieja amiga del maestro del lubrique (la amistad es así de gratificante) pasaba por allí, se encontró con un talón bien repleto de ceros y se puso a contar esas corridas que el torero ofrece a sus amigas en la intimidad. La supuesta amante acudió dispuesta a contarlo todo. Para contarlo no tuvo pelos en la lengua pero no la lengua en los pelos como la tuvo en los pelos del pubis del cubano su nueva chavalota en el reportaje de éste. Ahí sí que se vio claramente con una cámara a escasos metros con todo lujo de detalles el cepillado dental y carnal entre ámbos. Sin embargo la supuesta no pudo demostrar que se acostó con el torero más que con su palabra, y claro, ya se sabe que no todos creemos en el mismo Dios, y por tanto las batallas de este tipo sólo podemos verlas en el cielo rosa de la teúve.
Sinceramente, a mí me da exactamente igual si hubo o no manifiesta infidelidad. Cada uno cargará o no con el peso del cuerno. Lo que me da rabia es no poder inventar un artilugio tipo máquina de la verdad, el Chorrígrafo de los Records, y poder ofrecérselo a todos esos programas de cotilleo, conectar a la misma al personaje de turno y demostrar cual chorrada vertida por él es más grande que la anterior, amén de hacerme con una digna cuenta corriente.



martes, 25 de agosto de 2009

Flor de la vida

"Mónica mi amor, ya estamos toda la cuadrilla de vuelta en casa . Sólo faltan Mikel e Itzi, que volverán de Cuba el sábado porque tu primo tuvo que reemplazar tres días más a un compañero, de baja por enfermedad.
Granada espectacular, me fascinó. No quedó un rincón sin fotografiar. Hemos quedado para el domingo en el txoko de Andoni para tomar algo e intercambiar las tarjetas de memoria. Venecia, Madeira, Granada y las que traigan de Cuba. Habrá fotos para dar, tomar, ver y añadir a los albumes de recuerdos. Hablando de recuerdos, ¿recuerdas a Cuca, la perrita yorkshire que compraron los alemanes del chalet de piedra junto al lavadero? En realidad se la compraron para su hijo pequeño Frank. Una promesa que le hicieron cuando se repondría de la operación de amígdalas que padeció. Ya sabes, caprichos de niño unidos al de unos padres que se lo toleran todo. Pues ha estado toda la mañana a mi lado. La verdad que siempre ha estado conmigo más que con sus propios amos y no es de extrañar. Pues según se comenta en el pueblo, este verano cargaron el monovolumen hasta el moño de cosas y se fueron a Málaga. Cuca iba con ellos, muy a pesar de los padres de Frank, que querían dejarla al cuidado de algún vecino. Pero el lloriqueo y pataleo que agarraron los niños fue más que suficiente para convencerles. Como sabes, Cuca siempre ha estado en libertad; jamás había realizado un viaje en coche, y dicen que no pudo resistirse a vomitar, que el monovolumen quedó hecho un cisco con el consiguiente cabreo y bronca mayúscula de los teutones, que lo cuidaban más que a sus propios niños. Que hartos de perra, en un instante que los niños dormían, optaron por parar el coche y abandonarla en mitad de la carretera buscando cualquier excusa para engañar a los niños cuando despertasen. Imagino la mirada de felicidad y alegría de Cuca hacia sus amos cuando se abrieron las puertas del coche. Imagino esa alegría transformándose de repente en una mirada perdida y triste cuando se volvieron a cerrar y el coche se ponía en marcha sin ella. Avanzaría cientos de metros tras el coche intentándole dar alcance en vano. Imagino a esos dueños, echando la vista a los retrovisores comentando entre ellos que si no la atropellaba nadie, y con un poco de suerte, llegaría al pueblo más cercano y alguien se haría cargo de ella. Como te digo, ha estado toda la mañana tras de mí. Cuca tuvo suerte, y regresó. Ellos no volverán. En ese punto de la carretera donde fallecieron quizá alguien se encargue de llevarles flores. Perdóname que estas rosas no sean tan espectaculares y preciosas como las que te traje en primavera pero es que el verano está siendo muy seco y caluroso."


Lamentablemente nuevas flores "crecerán" en lugares inverosímiles como guardarraíles, vallas, postes , troncos de árboles, cunetas.... al finalizar el verano, y se marchitarán al lado de la muerte. En nuestras manos, y pies, está que cada vez mueran menos flores en esos lugares.

sábado, 8 de agosto de 2009

Lo vaquero no está reñido con lo hortero

Por estas fechas, no hay día ni lugar que te encuentres un comercio del gremio que sea con el cartelito de cerrado por vacaciones colgado de la persiana , eso sí, avisando cuando volverá a abrir. Yo también aviso. Me voy. Me lo he colgado a la espalda. Con fecha de caducidad: el 1 de septiembre. Así que este blog estará unos días sin nuevos post.

Hei, mi pequeño Mando y yo, nos repartiremos las vacaciones. Como amante de lo vaquero, mis días serán sin vaca, la venderé, y a lo que quede de las vacaciones le añadiré otro animal, un can, y me lo pasaré divinamente en cualquier lugar de la Tierra. Si habéis hecho bien esa resta y esa suma os dará un resultado idéntico al mío. Os reto a que me enviéis el resultado. También a que adivinéis el nombre del vaquero de la foto. Trabajad un poco que yo descansaré. Os premiaré con el enlace para ver y escuchar el "Honkytonk man" de Clint Eastwood.

Nos vemos a la vuelta y como se dice por aquí, opor zoriontsuak eta laster arte, felices vacaciones y hasta pronto.

jueves, 6 de agosto de 2009

Confieso que he pescado


A las puertas de la Iglesia un anciano se acercó

a confesar sus pecados que de joven cometió.

Saludando con un Ave, un María, y un Purísima después

sin pecado concebida, respondió el Padre Andrés.

Padre, en esa segunda guerra que en medio mundo estalló

huyendo del enemigo una joven a mi puerta golpeó.

Como buen samaritano le di apoyo y compasión

una estancia indefinida y una buena habitación.

Hijo, confieso que aquella acción fue un acto de caridad

y por tanto el confesar no tiene necesidad.

No dudo Padre que no, que no hubo acción de pecar

pero la cosa cambió cuando me insistió en pagar.

Yo no quise una moneda, nunca la quise cobrar,

y aún me paga hoy con su cuerpo y su manera de amar.

Hijo, en ese caso tampoco no tiene a bien confesarse

es otro acto de amor y no hay por que preocuparse.

No sabe Padre el alivio que esas palabras me han dado

no sabe usted cuanto peso de mi alma me ha quitado,

pero dígame buen Padre, sabiendo que no he pecado,

¿debería de decirle que la guerra ha terminado?
Ahora que está demostrado que las cabinas de rayos UVA producen cáncer de piel, en los solarium sólo van a tomar el sol las arañas mientras tejen su tela. Pero qué me decís de los confesionarios, ¿qué extraño fenómeno o qué estudio científico avalado por una prestigiosa universidad internacional acabó con la cita de los pecadores a ese reservado mueble de cualquier rincón de una iglesia? ¿ Será que el cura de nuestra parroquia no nos inspira confianza y puede que lo largue todo mientras se toma unos potes con tu cuadrilla? ¿Será que vivimos en contínuo pecado y para qué ir todos los días a chivarte al cura si seguro que ya se puede hasta confesarse por internet? Tampoco creo yo que haya desembarcado alguna multinacional de la Iglesia en las grandes ciudades y hayan montado una gran superficie eclesiástica y ofrezcan diecisiete altares como mínimo con tu Santo o Santa preferida, bancos de lujo abatibles con mando eléctrico con pantalla LCD delante de tus narices y cascos incorporados para ver y escuchar cómodo la misa y menú de pan y vino especial para mesa en pareja, sólo o en familia y confesionarios robotizados a modo de cajero automático que introduciendo tu clave bautismal accedas al menú principal de pecados, elijas el tuyo y pagues por ello, devolviéndote la máquina un vale con fecha de caducidad que el día que vayas a comulgar puedas presentarlo como prueba ante el sacerdote por si te lo pide y no vayas de listo a recibir la ostia gratis. Si es así, entonces lo entiendo, es la misma fórmula con la que otras grandes superficies han acabado con las pequeñas tiendas del barrio. Salvemos los confesionarios.

miércoles, 5 de agosto de 2009

La muerte tiene un precio; y suerte que ahora no es tan cara.


El motivo de mi larga ausencia ha sido originada por el fallecimiento de uno, si no el que más, de mis más fieles amigos: mi ordenador portátil. Digo fiel porque nunca me ha fallado cuando le he necesitado y me ha guardado todos los secretos habidos y por haber; sin embargo, nunca le perdonaré haberse llevado al garbigune (centro de recogida de toda clase de desechos inertes) toda la información que contenía su disco duro. Me ha dejado con lo puesto, pero bueno, a fin de cuentas era también parte de él.
Fue todo muy rápido por lo que creo que no sufrió mucho, salvo tener que soportar el contínuo y desesperado dedo a tecla que le practiqué ante la gravedad de su estado y algún que otro desmedido meneo antes de llevarlo al Hospital de Ordenadores(os juro por Hei que se llama así la tienda) de mi localidad. ¿Síntomas? Pantallazo azul y una montaña de letras, números y símbolos y el no inicio de Windows. ¿Diagnóstico? Subida de tensión, no arterial, sino voltaica con el consiguiente fallo multiorgánico de la placa base y el disco duro que acabaron como el churrasco a la brasa. ¿Solución? Cómprese un Agni y tire la vieja. Nada que hacer, no merecía la pena meter el estañador y menos aún encontrar un donante de placa base es lo que me dijeron los "doctores" de ese centro.
Así que aquí ando, de prestado. Espero aprovechar mi periodo vacacional a partir de la semana que viene para encontrar un nuevo amigo sin importarme su nacionalidad ni el color de su carcasa por esas grandes superficies de la electrónica que bombardean los buzones del portal con ofertas semanales y que algunas incluso ofrecen descuentos en función de tu edad. Veinte años, veinte euros menos. Lástima de no tener 1000 años, me habría salido gratis la muerte, pero toda tiene un precio y suerte que esta no es tan cara.