
Creo que mi pequeño Mando se está haciendo mayor, culturalmente hablando, y se interesa por el estado del mundo actual. Prueba de ello es que anoche me programó todo un clásico de la televisión en la idem: DEC. Siglas que dan nombre al programa "Dónde Estás Corazón" pero que ahora es reducido a tres letras para que cada uno haga una libre traducción y translación de esas siglas dependiendo del contenido del programa a emitir. Lo de anoche fue "Descalificaciones En Cadena" . Descalificaciones éstas, vertidas tanto en la cadena emisora como una cadena de insultos vertidos por los "cobraboradores" del tipo "y tú más" en respuesta a un "y más tú" previo a un "mentirosa" precedido de un "no eres nada ética"...etc etc etc. También pudo haberse llamado "Dinio En Comisaría" pues el confundido cubano tuvo su tiempo de protagonismo también esa misma noche. Pero el tema principal giró en torno a la supuesta in-out fidelidad del torero Capullín de jame que te la lubrique hacia su esposa María Nosé de qué campanario se ha caído.
Una vieja amiga del maestro del lubrique (la amistad es así de gratificante) pasaba por allí, se encontró con un talón bien repleto de ceros y se puso a contar esas corridas que el torero ofrece a sus amigas en la intimidad. La supuesta amante acudió dispuesta a contarlo todo. Para contarlo no tuvo pelos en la lengua pero no la lengua en los pelos como la tuvo en los pelos del pubis del cubano su nueva chavalota en el reportaje de éste. Ahí sí que se vio claramente con una cámara a escasos metros con todo lujo de detalles el cepillado dental y carnal entre ámbos. Sin embargo la supuesta no pudo demostrar que se acostó con el torero más que con su palabra, y claro, ya se sabe que no todos creemos en el mismo Dios, y por tanto las batallas de este tipo sólo podemos verlas en el cielo rosa de la teúve.
Sinceramente, a mí me da exactamente igual si hubo o no manifiesta infidelidad. Cada uno cargará o no con el peso del cuerno. Lo que me da rabia es no poder inventar un artilugio tipo máquina de la verdad, el Chorrígrafo de los Records, y poder ofrecérselo a todos esos programas de cotilleo, conectar a la misma al personaje de turno y demostrar cual chorrada vertida por él es más grande que la anterior, amén de hacerme con una digna cuenta corriente.